I WISH...

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Tal vez algún día todo cambie, quizás las cosas sean diferentes una madrugada sin darnos cuenta

Y pase que despiertes en tu cama, compartida o en soledad, tal vez mas en soledad, tal vez a él se le olvido legar, tal vez simplemente aunque este a tu lado ya no le veas, ya no le sientas, ya no le huelas, ni escuches sus ronquidos, ni le sientas húmeda la almohada, quizás aunque el calor de su cuerpo te indique que está allí, tu ya no le sientas junto a ti.

Quizás pase de camino al trabajo, una mañana fría, uno de esos días en que caminas entre la gente por inercia, uno de esos días en que llegas a la parada del camión y sientes antes de subir una duda, un vacio, unas ganas de no llegar a ningún lugar porque no hay ningún lugar donde alguien te espere, solo papeles, solo la tarjeta de entrada que marca tu llegada y tu salida, quizás ese día en que los tacones te pesan demasiado y tus pies gritan por tus tenis, una de esas mañanas que amodorrada aun sales sin maquillarte, sin el polvo que disimule las ojeras, y el rímel que esconda los rastros de las lagrimas que soltaste durante la noche.

No lo sé, podría ser una tarde nublada, y que entre el frio que recorre la ciudad te den ganas de caminar, de tomar un café, de perderse un rato entre las calles, sin calor que te pese, con el tedio que te pesa, sin prisas por llegar a casa, sin urgencias mas prioritarias que tomarte esa tarde unos pasos, unos roces del viento, y dejar que el cabello se enmarañe, dejar que te vuele un poco la ropa, que se desprendan de tus mejillas los restos de alguna lagrima que en silencio lloraste en la oficina.

Puede ser en cualquier momento, puede ser que todo cambie, que despiertes que despierte, que te encuentre y que sepas que estoy, que existo, que puedo ser, que sea yo tanto como eres tú para mi, todo puede cambiar, un día las cosas serán distintas, un día seremos diferentes, seremos tú y yo, y entonces la vida cambie, las historias cambien, y las heridas dejen de doler, y las lagrimas de arder, y entendamos que tuvo todo un sentido para poder encontrarnos, para poder mirarnos y reconocernos, para ver que todo cambia, que todo vuelve a ser una nueva oportunidad, de ser, de latir, de sentir, de amar.

Quizás pase mientras preparas tu desayuno, mientras el aceite brinque por los nervios ansioso por recibir al par de huevos que te desayunaras, mientras la plancha entre taquicardias vaporosas se deshaga en ganas por brindarle sus caricias a tu blusa de botones blancos, quizás pase mientras el vecino enamorado de al lado ponga una canción cursi a todo volumen mientras se prepara para salir al cine con su amada, quizás sea mientras miras por la ventanilla del taxi esa nube retorcerse entre jadeos transformándose en figuras alucinantes al roce del lascivo viento.

Quizás sea en el andén del metro, entre toda esa marea de gente sentirás algo, sabrás algo, y te darás cuenta de que espero en algún lugar, en una banca de parque, en la estación del tren, en la taquilla de algún museo, bajo la jacaranda de aquel jardín que hay en un bosque mágico que se perdió en algún cuento, quizás en ese preciso momento alcances a escucharme, y sepas que te nombro sin nombrarte, en silencio, sin saber aun si eres tú y sin esperanza de ser yo, pero aun así te nombro

Quizás pase que un día suene el teléfono y seas tú, o despierte en camión y estés a mi lado, o me pidas sentarte en la silla de mi mesa para dos en aquella cafetería donde siempre soy uno, quizás me encuentres, para no variar, mientras te espero.

Y aunque la espera sea la misma, y aunque la tarde parezca igual y tu cama y el asiento de al lado y los papeles en la oficina, y tu tedio y mi desolación, y sea la misma Luna de cada noche la que nos mira, quizás en ese preciso instante en que la duda de mi espera se cruce por tu cabeza, y la esperanza de tu llegada me dé un nuevo aliento, quizás, quizás en ese momento todo cambie y esta vez todo sea distinto.

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¿VALIO LA PENA?

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Me pregunto si valió la pena

Si valió la pena amarte

Si valió la pena hacer ese estúpido intento porque te supieras amada, diferente

Si valió la pena caminar a tu lado mientras te ausentabas

Si valió la pena el morderme las ganas para decirte que tenía ganas de más que solo tu cuerpo

Si valió la pena esconderte para que nadie te viera a mi lado y no te avergonzara

Si valió la pena quedarme en silencio para que mis latidos no te asustaran

Si valió la pena encontrarte

Si valió la pena que me alejaras de esta manera tan violenta

Si valió la pena un beso sin pretextos

Si valió la pena una sonrisa al despertarte

Si valió la pena acompañarte entre tu tedio y el hastío para regalarte un instante sin pesadumbres

Si valió la pena tratarte como lo que veía en ti y no como los demás te miraban

Si valió la pena hacerme a un lado para que tú acercaras a tu lado a quien tus antojos te indicaran

Si valió la pena ese intento malogrado de quedarme a tu lado sin tener que estar

Si valió la pena preocuparme por tus malestares, arroparte cada noche, mantener tu estomago tibio, y el corazón menos frio

Si valió la pena aunque sea un poquito las tardes que pase a tu lado y las noches que bese tu vientre

Si valió la pena el creerme tus sonrisas

Si valió la pena encontrarte al amanecer con un bostezo y una caricia en tu rostro

Si valió la pena compartirte un poquito de mi, y dejar que me compartieras un poquito de ti, ese poquito que no sueles compartir

Si valió la pena abrazarte al dormir, y que sobre la cama en que no duermes te abrazara después de abrazar tu ausencia

Si valió la pena descubrirte bella entre tus cotidianidades, cuando querías que te descubriera bella entre tus feminidades

Si valió la pena dejar de ser una noche quien te imaginaba para volverme una mañana quien te besaba

Si valió la pena tanta palabrería cursi, tanta necedad de encontrarte sincera y encontrarte, tanto silencio, tanto roce sin pretextos, tanta osadía mía para ser lo que tú querías, lo que no pude ser

Si valió la pena, si vale la pena

Pero tu ausencia me lo dice todo, pero tu indiferencia me hace entender, pero tu cama tibia por las visitas me descubre la realidad

Jamás valió la pena, porque jamás valí la pena para ti

Y no vale la pena seguir con mas dramas y cursilerías baratas que no valen la pena

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SE TERMINO

Se termino esta noche cada latido que sentía para ti

Se termino el tiempo de esperarte imaginando que llegarías

Se termino porque mientras en mi solo existían esperas, sobre tu piel brotan caricias con los besos de él

Se termino este andar flotando entre tus recuerdos aferrándome a que fueran más que recuerdos, a que fueran esperanzas, posibilidades, ecuaciones conocidas donde la variable que eres tú alterara mis erróneos resultados

Se termino porque al final el resultado fue el mismo, porque al final fuiste tú igual que mis pasados, y porque al final sigo siendo yo sin ninguna variable

Se termino mi incredulidad que soportaba tus mentiras, que se tragaba tus engaños, que justificaba tus ausencias y me regresaba cada amanecer al recuerdo de tus piernas

Se termino todo, se cerró el grifo por donde a chorros brotaba esto que sentía por ti, se cerró porque de ti nada goteaba con mi nombre, pero cuantos nombres, cuantos, cuantos, y siendo solo uno no te basto, no alcance a tener el coraje de ser mas, de ser uno mas

Se termino el verte solo a ti en cada rostro, porque en cada rostro tú viste a alguien más, y no era yo a quien encontrabas roncando a tu lado al despertar

Se termino porque el eco que traían tus silencios ha cesado, y ha dejado susurrar el estruendo de tus mentiras, de tus traiciones, de eso que ocultaste, por accidente, o con toda saña corriste el velo que libero ese estruendo

Se termino porque las ilusiones terminan, porque no supe hacer más que mirar esa ilusión que tú eras, y no es tu culpa el que yo me las creyera

Se terminaron ya las horas que pase perdido en tu sonrisa, y las que el reloj aun no marcaba donde me perdía en tu futuros inciertos

Se terminaron las cursilerías que terminaban mencionándote, esas que jamás necesitaste, esas que jamás me pediste, esas que te estorbaban

Se terminaron mis ñoñadas, mis ridiculeces, mis estúpidos suspiros desvariándote, pensándote, soñándote, mencionándote, descubriéndote a ti que no fuiste nunca tú, que no fuiste jamás lo que vi, lo que creí

Se terminaron las ganas de quitarte el frio, las ganas de tus ganas, las ganas de las mías que frente a tu gélida tibieza se despertaron después de un coma, se terminaron porque jamás tuviste ganas, porque fue lastima, fue gratitud, fue tu falta de valor para rechazarme, pero jamás fueron tus ganas

Se terminaron los rastros de tu piel que anidaba en las comisuras de mis labios, se los llevo el huracán que te envolvió de pasión todas las noches que estuviste lejos

Se terminaron mi pendejas ideas de poder ser hombre, de poder ser mas, de poder ser lo que quisieras mirar

Se termino todo entre vacios, entre distancias, entre tus compañías, tus apetitos, tus vicios, entre nombres que no fueron jamás el mío, entre rostros que no poseo, en pieles que no tengo, se termino porque tenía que terminarse, porque las ilusiones son solo ilusiones, porque lo que quise ver en ti fue solo eso y nada más, porque lo que tu viste en mi fue nada y solo eso

Se termino para no tener que odiarte, para no tener que recordarte entre sollozos, entre desprecios, para no mantener en mi la imagen que los que han pasado guardan de ti

Se termino porque respeto lo que quise que fueras, porque prefiero que sea así, y se termine esta noche todo sin dañarte, sin dañarme más

Se termino entre olvidos, entre un silencio que me cobija para no seguir repitiéndome que se termino todo

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QUISIERA SER COMO TÚ

Quisiera ser como tú y que no me importaran los recuerdos, tener tan acorazado el corazón que las caricias no lograran sentirse y mucho menos anidar tibiezas sobre la piel y el alma

Poder sacudirme los besos como arena en los pies, y que fueran solo besos, y que fueran solo nada, y los deseos extinguidos sobre sabanas de algodón fueran solo pelusas que al tender la cama por la mañana salieran flotando por la ventana

Quisiera ser así de simple, así de “normal”, y que tu sexo solo fuera manjar, y que tu ternura fuera solo simpleza y no pretexto para descubrirte nuevos poros en la piel que se sonrojen al andar de mis dedos, no ser capaz de envolverme con el aroma de tu deseo cuando emana tu corazón humedades entre tus piernas, y saber que destilas amor, y saber que es más que sexo, más que arrumacos febriles que como adolecentes consumimos en el sillón de la sala, en la mesa del comedor, en mitad de las escales, en tu cama, en el baño mientras la ducha resbala sus lagrimas que bebo sobre tu piel, que fuera más que eso, que fuera todo eso y mas

Quisiera ser como tú y tener valor para olvidar, o más bien no tener nada que desear recordar, que no hubiera cuatro letras retumbando al decir tu nombre, que no fuera tu mirada el portal por donde encontré lo que debajo de tu armadura se escondía, que no fuera tu mano la que extraño dentro de la mía cada vez que el viento me golpea la piel, y seca las ausencias húmedas que sobre mi cara van dejando surcos.

Quisiera ser como tú y ser “normal” y no ser cursi, y no ser quien te ama, y no saber que lo hice y que te encontré cuando no buscaba a nadie, y que me miraste como miras a todos;

y no saber de madrugadas recorriéndote la espalda, y no haber probado nunca un solo poro de tu piel y que tus labios fueran solo labios, sin mañanas, sin cuatro letras, sin mi nombre escapándose entre gemidos;

Que tus muslos fueran solo pasos que te alejan y te acercan a mí, a otros, a la nada, y que no fueran esos imponentes portones que resguardan el templo que adore cada vez que la obscuridad caía sobre tu cama y que alumbrabas mis caricias con el fuego de tus deseos

quisiera ser como tú y no tener nada que decir, que no guardara mi memoria un solo latido a tu lado, y no seguir con las manos llenas de tu piel y el corazón lleno de lo que siento por ti, der como tú y no tener nada que sentir por ti

SIEMPRE FUE TARDE

Sé que es tarde para los dos, para volver a ser lo que fuimos antes, para recapitular nuestros errores y remediar lo que en el pasado ha dejando cicatrices en nuestro futuro

Pero sabes que te amo, que no hay otro horizonte al que corra, ni oasis mejor que me cubra del sol que la sombra de tus latidos, y me miras ahora y estas por marcharte

Y quisiera recordarte todo lo que fuimos, todo lo que solíamos construir y las veces que de la mano nos miramos grandes frente a las tempestades que se nos ponían de frente, recordarte cada noche que entre desvelos dejaste que fueran mis manos las que te entibiaran los lunares del frio, y las veces que entre charlas cursis me dejaste cambiar tu mundo mientras con tu mirada profunda cambiabas el mío y lo llenabas de tus sonrisas

Pero es tarde para los dos ya, y tú te marchas sin quererme escuchar, y cada estrella que te pinte se decolora ante tus lagrimas mientras me pides comprensión

Y no entiendo el porqué de mis errores, ni entiendo su gravedad, ¿a caso te falle? ¿Fue a caso que no te supe abrazar? ¿Fueron mis labios los que no te supieron besar? ¿No fue tan fuerte mi voz al gritarte entre susurros que te amaba? ¿Qué fue? ¿Qué fue?

Pero solo respondes con más lágrimas y sigo sin entender porque ¿si fue acaso mi amor el que te hirió o el que no te basto? Pero prometí verte feliz, prometí hacerte feliz, y aunque me muerda las ganas por pedirte otra oportunidad, aunque me muerda las ganas de pedirte que me enseñes de nuevo a amarte, ya es tarde para nosotros, ya es tarde para el amor, y es tarde para cumplir lo que en el tintero quedo pendiente por escribir, y secan los colores de mi paleta, y ya no hay caricias que dibujar sobre tu espalda, se terminaron las travesías por tu piel, se terminaron los naufragios a tu lado y no queda más agua en tus oasis que sea para mi, y recuerdo que te prometí verte feliz, pero hoy me pesa y quisiera que lo entendieras tu también, que se que ya no está en mis manos el despertarte alegrías y ya no hacen eco tus latidos con mi nombre, pero pesa escucharlo en tu silencio, pero pesa saberlo de esta manera, pesa verte llorar cuando es por mi por quien lo haces

Así que es tarde ya para los dos, y no hay nada que el recuerdo pueda milagrosamente hacer latir de nuevo dentro de ti, y ya es tarde y tú te vas, te me vas, y te pierdo y sé que me estoy perdiendo yo también, que no hay nadie más a quien yo quiera pertenecer que a ti, y que sin ti que fuiste brújula para mi norte me perderé de nuevo en el océano violento de la soledad, de esa que pesara mas cuando tú te hayas ido

Pero es tarde ya para un nosotros y no caben más los tú y yo, y ahora es tú y él, y yo sin ti, y pesa ver como entre tus lagrimas se desvanecen los besos y las palabras que te di, y se pierden las tardes de reencuentros y esa manía mía de calmar tus cólicos con paños calientes, y abrigarte cuando hacia frio y salir a caminar cuando las tardes eran lindas que a tu lado todas me parecían así, y se desvanecen ahora las bravuras con las que enfrentábamos el futuro con toda su incertidumbre, y con la única certeza de que te amaba y te amaría, y que me amabas y me amarías, pero hoy ya no es así, ya es tarde para seguir haciendo futuros, para seguir en presentes a destiempo en que un día era toda una tarde, toda una noche, y sin importar las manecillas del reloj seguíamos en el hoy, sin saber que para todos ya era ayer

Y ayer ya es tarde, y hoy ya no es nada, y sigue siendo tarde ya para nosotros que nos creímos tan fuertes y que solíamos ser lo que el amor nos latía dentro, y me miras con lagrimas y ya no puedo mirarte, y si comprensión me pides he de comprender entonces que te vas, que debo soltar tu mano por las noches, dejar de reconocer tu aroma, dejar de perderme en el tono profundo de tus ojos, y que no hay nada que pueda decirte esta noche para que te quedes o decidas regresar de los brazos de él, hasta estos brazos míos que te extrañan y que mueren por abrazarte una vez más, mil noches más.

Pero ya es tarde y solo queda decirte adiós, y te seco las lagrimas y tomo tu rostro con las dos manos, pero esta vez mis labios no buscaran los tuyos, esta vez beso tu frente para bendecirte por todo lo que bello que me diste y que me hizo latir para saberme vivo, incluso este adiós que hoy late dentro de ti y que al hacerle eco con mi quebrada voz es la ultima manera que tengo de regalarte un te amo

Pero es tarde ya y no alcanzo a secarte las lagrimas, es tarde ya y tu estas con él, es tarde ya y no queda ya un nosotros, es tarde ya incluso para soltar estas lagrimas que tu adiós me han dejado, y prefiero dormir una noche más sin ti, diciéndote que te amo, que aun te amo donde quiera que estés, pero es tarde ya incluso para que lo sepas.

TAN LEJOS DE TI

Y aquí estoy una vez más ante el final de tu recuerdo, ante el adiós que supe que llegaría desde el primer día en que te vi sonreírme por primera vez

Y me sigo sentando al pie de tu cama, y sigo reconociendo tu aroma entre el viento que me desvanece por las tardes que camino las nubes que solíamos dibujar

No sé qué paso, no sé si fue solo un sueño, pero te sentí tan cerca de verdad y no mentí jamás al decirte que te amaba

Y te vi de rodillas, y te vi llorando, y te vi volando con sonrisas en el pelo y mis miedos se apagaron junto con los tuyos, y te vi al enfadarte y apague tu enfado y te cuide cuando enfermaste y te bese la frente cada noche para ahuyentarte las pesadillas, y te desperté rozándote para entibiar las horas frías de tu amanecer, y te vi amarme y te ame

Pero aquí me he quedado a solas con tu recuerdo, sin querer buscar los errores que cometí porque ya no tiene sentido, dijiste adiós y cada noche te alejas más

Y sigo con la humedad de tu piel entre mis dedos, y sigo con el sabor de tus besos, y sigo con el calor de tus sueños, pero sigo aquí sin ti, y pesar de tu distancia aun te siento cerca, aun beso la almohada buscando tu frente, y en el espejo del baño algunas veces parece dibujarse tu silueta desnuda, y sigo aun poniendo dos tazas sobre la mesa, y sigo aun escuchando tu risa al atardecer retumbando entre los ecos de aquellas calles en que te ame, en que me amaste

Pero todo ha terminado y me encuentro aquí solo sin ti, sin las promesas que no pudimos cumplir, y los futuros perdidos en que eras tú mi destino y yo el de tus labios, y mi nombre desapareciendo entre este vacío, después de haber sonado tan fuerte cuando era solo mi nombre el que sabias decir, y el tuyo el mejor sinónimo de amor que encontré

Y reconocí tus miedos y aceptaste mis defectos, y me dejaste entrar hasta donde nadie había llegado y tumbamos muros para encontrarnos y desquebrajamos los pasados y olvidamos y perdonamos, yo a ti y tú a mí, y ahora estoy tan vacio, estoy tan ajeno de mi, tan lejano de ti, y siento tanto frio, y siento tanto tu ausencia, y sigo adelante con mi vida sin saber a dónde ir, y sigo recordando todo lo que solíamos ser, y sigo perdiéndome más al ya no encontrar nada de eso lejos de ti

Y sigo preguntándome si te acuerdas de mí, si aun tu brazo extraña el mío para caminar de regreso a casa, si aun buscas mi insomnio para ahuyentar tus pesadillas, si extraña tu cuello que enredé una bufanda para abrigarte del frío, si es tu cama aun ese lugar donde mencionas mas mi nombre, y donde mi nombre era el refugio de tus malestares, y con mimos y cuidados me encargaba de desaparecerlos y que sonrieras al ganarles la batalla con mis cursilerías, y al final cerrar tus ojos con un beso para que pudieras dormir sin llantos, sin soledades

Y aun me pregunto si fue todo real, si fue tú sueño o el mío, o algo que creamos entre dos y que aun vive entre estos recuerdos que se anidan a mi soledad y que me mantienen tibio aun el corazón, que conservan aun tu amor, y el amor que yo te tuve, que aún conservo junto con tu aroma en el aire que respiro

Y sin saber que hay tan lejos donde estas, me pregunto si las cosas que siento también asesinan tus silencios de la misma manera en que por las noches mueren los míos cada vez que digo tu nombre y un te amo, si aun recuerdas, si aun me sientes, si aun me reconoces como esa parte de tu vida que te hizo sonreír, que te encontró llena de virtudes que no conocías, y que acompaño tus tardes de otoño mientras tu soledad y la mía se perdían entre las hojas de los arboles sobre el adoquín de las calles

Y aun en este vacío, y aun sintiéndome tan solo, aun estando tan lejos de ti, te grito que te amo, y que es verdad, que siempre fue verdad, y que extrañarte de esta manera tan desolada es la muestra de que así fue, de que así es, si pudiera saber que tú estas igual, si pudieras decirme y hacerme saber que aun estoy a tu lado, porque tú aun sigues llenándome de vida, a pesar de tu ausencia, a pesar de la distancia, a pesar de seguir siendo el mejor pretexto para haberme dicho adiós, a pesar de no poder ser todo lo que esperaste, aun así quisiera saber si estas pensando en mi, si es tu mano lo que siento entre mis dedos cuando camino por todos los recuerdos que tuvimos, si eres tu quien en el aire menciona mi nombre, si aun podría ser yo el nombre que mencionas al soñar

Pero sigo despertando lejos de ti, sigo tan lejos de mí, sigo tan vacio, tan perdido, sigo sin ti, esperando que aun me recuerdes, y recordando todo lo que solíamos ser.

CUANDO DUERMA A TU LADO

Cuando duerma a tu lado no quiero herramientas de navegación,

No quiero brújulas, ni mapas, no quiero ubicar cada parte de tu cuerpo mediante estrellas,

Cuando duerma a tu lado quiero perderme

Quiero ser naufrago

Quiero ser exiliado en los desiertos de tus dunas

Quiero redescubrir cada manantial que escondes entre tus poros

Cuando duerma a tu lado quiero ser barco a la deriva, que sea el movimiento de tu oleaje el que me meza de un lado a otro

Que sea el viento que sale de tu garganta entre gemidos, el que me indique hacia donde ir

Y perderme en el norte de tu cuello, rozar tu yugular para sentir tu pulso acelerado,

Tus clavículas entre mis labios, sintiendo tu agitación,

Tus axilas abiertas sosteniendo tus brazos, que esa noche se volverán las velas que guíen mi embarcación, que esa noche se volverán alas,

Cuando duerma a tu lado déjame perderme en el difícil arte de la contemplación, mirarte la piel salpicada entre lunares, cicatrices y las estrías de tus caderas, contemplarte entre caricias, entre roces de mis dedos dibujándote huellas entre tus dunas,

Pasear mis pupilas por cada rincón, por cada comisura, por cada desvelo que no te bese, por cada marea que me antoje el deseo de zozobrar,

Mirarte en la lejanía que es tu desnudez,

tu pudor disfrazado entre tus mejillas sonrojadas,

y tu deseo asomándose entre jadeos,

entre el frio desvaneciéndose sobre tu piel, mirarte retorciéndote, meciéndote, esparciendo tu deseo sobre las sabanas, tu cuello hacia atrás dejando ver el aire debajo de tu garganta,

Mirarte, mirarte, y entre guerrillas besarte, mientras ese fuego cruzado que son mis manos recorriéndote y tus caderas estrellándose contra mi pantalón, me guían para encontrar tu placer

mirarte con los dedos, con las palmas de mis manos contemplando la firmeza de tus nortes, mirarte con la lengua que recorre tu piel y memoriza los tonos de cada duna, los sabores que mantienen escondidas las aguas de tus oasis, mirarte con mis labios despertando los bellos de tu piel, mirarte, probarte, consumirte entre el aire, entre el eco de tus suspiros, entre susurros que me indiquen las sendas que te pierden y que me pierden, y que nos encuentran con las sabanas atrincheradas asesinando el frio que en la habitación de tu soledad y de la mía habita

Cuando duerma a tu lado déjame respirar el aire que hay debajo de tus senos, bajar como el viento rozando con mis labios de bruma tus costillas,

Besar tu vientre, respirar tu vientre, ser éter sobre tu agitado vientre, éter que roce, éter que se pierda sobre tu piel dejando rastros húmedos, éter que se adhiera a tus comisuras, a tu bello, a tus humedades, éter que se vuelva solido y se estrelle mientras jadeas, mientras meces tu cintura y tus manos se enredan en mi cabello, jalándome, empujándome, hundiéndome en tu vientre y lanzándome a tu sur

Cuando duerma a tu lado que sean tus manos la brújula que me indique tu sur, que me lleven hasta tu sur, y encontrar tu placer en la húmeda piel que duerme en el rosa de tu sonrisa vertical

Lanzarme a tus orillas, perderme entre la prisión de tus muslos tibios, que sea tu respiración lo que me sacuda las tempestades de tus naufragios, de tus pasados, esos mal apreciados pasados, esos desvelos que pasaste sin pasar, que te rozaron solo la piel, solo los minutos que tardo el olvido en apagar las ganas, solo el deseo ajeno, mas no el tuyo, mas no este mío que es encontrar tu placer

Cuando duerma a tu lado ahógame con tus piernas, violéntame con tus caderas, asesíname extrayendo de mi boca todo el aire que hay dentro de mí, sácalo todo con tus besos, y como agua de manantial déjame regarte mi aire por la piel, que sea mi aire lo que te envuelve, que sea mi aire lo que te cobija, lo que te agita, lo que te humedece entre mi saliva y tus humedades escondidas

Cuando duerma a tu lado, no me dejes dormir, pero sobre todo no me dejes llegar a ver un nuevo sol y menos si despierto lejos de ti

VOY A AMARTE Y PUNTO

Esta noche voy a amarte como nunca nadie te ha amado.

Esta noche voy a amarte sin pedirte que correspondas a esto que nace en mí para ti, esta noche voy a amarte sin decirte nada, sin pedirte que escuches cuanto te amo, sin pedirte que me entiendas, sin pedirte nada a cambio de este amor.

Esta noche voy a amarte desde mi silencio, desde mi obscuridad, desde mi soledad y la tuya, voy a amarte te digo como se amar, como solo un loco como yo podría hacerlo.

Voy a amarte a distancia, con ausencias, con todas mis ganas.

Voy a amarte por qué no puedo hacer menos después de conocerte.

Voy a amarte sin que me conozcas, anónimamente, ansiosamente, desesperadamente.

Voy a amarte sin razón, ¿o es que acaso necesito una razón para entregarte este amor? Créeme que no encuentro una mejor que saber que todo este amor tiene tu nombre, por eso te lo doy, por eso te amo.

Voy a amarte sin que lo sepas, sin que lo sientas.

Voy a amarte desde donde este, sin importar con quien estés.

Voy a amarte así, mientras vas leyendo cada una de estas palabras que no te dirán que te amo.

Voy a amarte sin pedirte que me correspondas, sin pedirte que me mires, que no te vayas, sin decirte quédate conmigo esta noche.

Voy a amarte sin pedirte que me mires a los ojos para que lo creas, sin pedirte que me toques para que lo sientas.

Voy a amarte sin que tengas que escuchar mi voz diciéndote cuanto te amo.

Voy a amarte sin que sepas que te amo, sin que sepas que he sido yo quien más ha ganado al verte caminar con otro tomada de la mano, sin explicarte que gane todo cuando perdí tu corazón por verte feliz, sin lastimarte si te digo que te amo.

Voy a amarte ya ves, como nunca nadie te ha amado, sin esperar de ti el mínimo latido de tu corazón.

Voy a amarte y punto.

ME JUEGO TODO POR NOMBRARTE

Y me juego todo esta noche para poder decir tu nombre

Y me juego las desganas

Y me juego los miedos

Me juego las derrotas de mis pasados

Y de los tuyos

Me juego el frio para asesinarlo a tu lado

Me juego las soledades angustiadas en peligro de extinción

Me juego los vientres de papel que te escribí

Y las estrellas que marcaron tu destino y desviaron el mío

Me juego esta madrugada las llamas que encendieron entre tabacos todos mis deseos

Los cerillos que fui tratando de alumbrar tu sonrisa

Me juego lo que soy lejos de ti, para ser lo que necesito y quedarme a tu lado

Me juego las manos frías, los corazones tibios, tus pasitos somnolientos cuando despiertas, tus ronquidos mientras sueñas, y ese brillo en tus ojos tras el que escondes tu ternura

Me juego los recuerdos, los vividos a tu lado y de tu mano

Y aquellos que en tu ausencia me invente para entibiar mis tardes de lluvia

Me juego las miradas sobre tu piel, los besos sobre tu vientre, un suspiro bajo tu ombligo, la línea de tu espalda y ese frenesí que asesine por miedo

Me juego las noches que no llegaste, y las que me dejaste quedar para verte despertar, y después volver a soñar

Me juego tu mirada detrás del cristal mientras la lluvia de tus ojos se contenía por tus soledades, y a distancia diluvios subterráneos humedecían tu recuerdo anidándose dentro de mí, entre rastros de tu aroma y las sonrisas que te provoqué

Me juego por decir tu nombre, los regresos, las despedidas, los encuentros a las seis de la tarde, las despedidas al amanecer, un beso sin pretexto, una reconciliación entre cafés, tus pucheros y tus angustias por las cosas más sencillas, tu cabello después de bañarte, y mi espera entre pinceladas

Me juego, ya lo ves,

Por decir tu nombre todo lo que tengo y lo que no

Pero no por decirlo como lo dicen todos,

Me juego esta noche todo para decir tu nombre con todo el valor que me falta para ser quien quieres que sea,

Para que por una sola vez escuches que te nombro y sea yo a quien nombras

Mientras dices un te…

PERDIDO ENTRE TALAVERAS

Salí muy temprano a recorrer las calles, a encontrarme con tu ausencia en este lugar donde no estás tú ni tampoco yo.

Salí a perderme entre talaveras, entre adoquines de colores, a buscarme a buscarte, y te encontré como siempre entre las parejas que caminaban de la mano, en los besos ajenos, en los suspiros de las mujeres que sentadas en una banca esperaban a un tipo que no era yo, pero tampoco eras tú quien dibujaba una silueta frágil con su sombra.

Y me senté en la mesa que últimamente ha sido mi cómplice en esta espera, y me senté a esperarte, y a pedirle un café a la mujer que de tanto regreso ya me reconoce y me ofrece lo mismo cada día.

Y me senté a escribirte, a contarte un rato como ha sido esta ausencia de ti en estos días, en estos años, en esta vida en que no llegas.

Y me senté a buscarte, a esperarte, a imaginar que llegabas y sin decir nada te sentabas en esta mesa, y tomabas mi taza y sorbías el café, te recargabas en el respaldo de la silla y cruzabas la pierna, todo en silencio, todo mientras tus ojos se clavaban en los míos, y tus labios dibujaban una sonrisa, para desgracia de mi fantasía cada vez que estabas por decir algo, llegaba la mesera y me sacaba de tu recuerdo, con una sonrisa y un –¿algo más?.

Termino mi café y de nuevo salgo a perderme entre talaveras y adoquines, entre tu recuerdo, entre tu ausencia, tratando de encontrarte, y de encontrarme, y termino mas perdido entre una ciudad que no me reconoce, que no reconozco, y donde no te encuentro.