QUISIERA SER UN CABRÓN Y QUE TU FUERAS SINCERA

Algunas veces quisiera ser un hijo de puta con la conciencia de serlo, y andar con la sonrisa cínica en el rostro valiéndome madres las cursilerías y ñoñadas que tiendo a hacer, que tiendo a ser.

Quizás siendo un cabrón de mierda puede hacer que la gente deje de verme como esa patética figura que encuentran en mi, “niño lindo” que carajos es un niño lindo, un pendejo que por ser buena persona la gente lo tiene cerca de vez en cuando, pero solo lo suficiente para tenerle a la mano si hacen falta sus cursilerías, además de que por ser lindo no se le puede alejar para evitar lastimarlo, a eso yo le llamo lastima y la lástima es para aquella bestia moribunda que evita uno ver, que por humanidad compartes su pena pero que jamás te pondrías en su piel para saber cómo se siente en realidad, así que vitas mirarle demasiado tiempo, yo aunque apeste por mis cursilerías no soy una animal moribundo, así que no me tengas lastima, ni soy niño ni soy lindo, y esa mirada de lástima que pones sobre mi me fastidia, me desespera, me encabrona.

No pretendo que me tengas a tu lado, no pretendo que me dejes quedarme más tiempo del que debería quedarme en tu vida, se partir, se esconderme, se decir adiós, se hacerme a un lado, porque hacerme a un lado es lo mejor que sé hacer, no necesito de tus miradas de lastima para sentir un poco de aprecio, cada vez que me ves con lastima es como si me dieras una patada en las espinillas, como si creyeras que soy tan frágil que tus indiferencias me duelen, me rompen y no es así, porque yo nací roto, naci quebrado y así soy, y no me fracturare mas.

Así que deja de callar por lastima, de esconder lo que haces o piensas solo por esa lástima que tienes hacia mí, no me romperé porque estés con otros, no me quebrare porque beses a otros, no me matare por saber que compartes con otros lo que yo quisiera que compartieras conmigo, nunca firmamos contrato de exclusividad, nunca te dije que fueras mía, nunca pretendí creerme parte importante de tu vida, aunque tú lo seas de la mía, no pretendo que tú hagas lo mismo.

No me romperé por tus engaños, esos que detrás de tus silencios ocultas, no me romperé por tus ganas de mas, por no ser quien te llene el estomago y las sabanas, por no ser quien te antoje besos y caricias, no me romperé por no ser quien te haga humedecerte con palabras con miradas con todas esas cosas que simplemente yo no puedo hacerte sentir, así que deja de callar, deja de esconderte, deja de sentirme lastima, deja de verme frágil porque no lo soy, deja de verme como un niño lindo, me caga que me veas así, me caga que me mantengas a tu lado solo por no querer herirme, solo por gratitud, solo porque te gusta cómo te miro, cuando en realidad piensas en otro.

No me tengas ni un puto gramo de lastima, ni te quedes conmigo por gratitud, no quiero gratitud porque nada hice por ti, fui contigo como se ser, no se ser de otra manera, no puedo, pero eso no te obliga a quedarte, a fingir que te interesa estar conmigo, a fingir que te mueven mis besos, a fingir que me extrañas cuando estas con otro, a fingir que no te cagabas de risa cuando me viste llorar en silencio por no ser el.

Quizás no sea el hombre que es él, pero soy lo suficiente maduro para saber que no soy lo que quieres en tu vida, que no necesitas la mierda que traigo en el pecho, que te estorban mis paso, que te desespera que sea así de frágil, pero no soy frágil, solo soy de arena, y si, me desmorono cuando sopla el viento, pero con un poco de humedad vuelvo a crear mis pinches castillitos para vivir, así que no dejes que el desmoronarme te confunda, no me creas así de frágil, no creas que tus golpes son los más violentos, no creas que no he escuchado antes esas explicaciones que te empeñas en darme para repararme, te lo he dicho no hay nada que reparar, naci roto, naci de arena, y por eso no me rompe el que te vayas, no me rompe el que estés con otro, no me rompe que tengas ganas de mas, que quieras mas, no me rompe nada de lo que hagas o dejes de hacer con otros, lo que me parte la madre es que prefieras callarlo o esconderlo por tenerme lastima, por gratitud, por no sé qué diablos, pero no hace falta ni tu lastima, ni tu gratitud, lo que te di, lo que sentí, quise dártelo y sentirlo sin que nadie me obligara y sabiendo que al final habría un final, y que soy tan poco para ti que no te llenaría la vida, y menos con mis ñoñadas y mis cursilerías baratas.

Quisiera ser ese cabrón que te bese y sacie tus deseos, ese valemadrista que al final le dices adiós sin que te importe lo que sienta, ese que desechas sin remordimiento, que no te importa soltar, que le ves tan fuerte que sabes que puedes serle sincera y decirle que ya hay otro, que nunca fue importante, y quisiera ser así de cabrón simplemente para que tú fueras así de sincera como eres con él.

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